Si existe un nexo común en los armarios de prescriptoras de estilo, editoras, modelos y diseñadores por un lado, y el de las anónimas del mundo por otro, es la presencia de los pantalones vaqueros como prenda comodín para resolver cualquier tipo de estilismo de día a día. Todas las personas que integran el engranaje que hace girar la industria de la moda, aquellas que están al día de las últimas novedades y son capaces de abanderar incluso las tendencias más complicadas, son conscientes también de que los jeans siempre tendrán su sitio en el vestidor, pero no todos deberíamos a recurrir al mismo diseño, sino encontrar esa pieza que nos favorece especialmente de acuerdo a nuestra figura. A una persona que mide 1,60 cm no le quedará igual el vaquero mom fit que luce alguien de mayor altura. O en una silueta recta, el tiro de la prenda no debería ser el mismo que para una chica con curvas, siempre y cuando nuestro objetivo sea dar con la propuesta más favorecedora.